Optimo México | Mejor estudiante que alumno
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Mejor estudiante que alumno

Mejor estudiante que alumno

Mejor estudiante que alumno.

En México es muy común referirse a aquellos que van a la escuela de manera indistinta como alumno o como estudiante, pero ¿qué es más apropiado? Y sobre todo, ¿por qué? Hay que decir que “estudiante” es un participio del verbo “estudiar”, es decir, ‘el (ente) que estudia’. Se forma a partir del sustantivo “estudio”, del latín “studium”, que viene, en última instancia, del verbo “studeo”. Ahora bien, en un principio la palabra “Studeo” no significaba “estudiar” como lo conceptualizamos actualmente, sino “el que pone atención” o “el que se esmera en algo”, con el paso del tiempo y con la enseñanza de los distintos oficios, a aquellos que se iniciaban en aprender un oficio en particular pasaron de ser “studentes” a “apprentices”, que indicaba “la adquisición de prácticas en algo”, en cambio los que se inclinaron por la “Litteratis Studente” se les llamó “Estudiantes” ya que se esmeraban en escribir mejor, en leer mejor, en saber mejor las cosas, desde el puro conocimiento mismo y su “praxis” era la escritura y la conservación de lo que ya estaba escrito. Por otro lado, aún hay discusión sobre la palabra “alumno”, por un lado parece ser que viene de “a” que significa “sin” y “lumnus” de “Lumen” que significa “Luz”, es decir, “aquél que no tiene luz”, no tiene conocimientos y por eso hay que dárselos, pero al parecer la versión más aceptada es la que refiere a “alumnus” como procedente de “alomenos” que significa “alimentar” , “nutrir”. En un principio esta palabra refirió al niño que era amamantado por la madre, pues lo alimentaba, a veces porque la criatura lo pedía y a veces porque era ya necesario extraer la leche materna para evitar enfermedades. Con el tiempo “Alumnus” pasó a ocupar el puesto de aquel niño al que se le “alimentaba intelectualmente”, quisiera o no, aun así, se le alimentaba. Esto puede explicar un poco por qué aquellas personas que solo fueron alumnos una vez que salieron de la escuela sintieron alivio y libertad, puesto que no querían ser alimentados, en cambio aquellos que fueron, son y, seguramente, serán estudiantes siempre tendrán ese deseo por aprender, por ser mejores en su quehacer mental y práctico. Estudiante eterno, alumno por un tiempo. Es cuánto.

Luis Lúcia
LUXIA – Capacitación y Consultoría.

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